Nos echa humo el teclado con la investigación que estamos cerrando, de la que tendrás noticias en breve, pero no queríamos faltar a la cita semanal de nuestro boletín. Hoy te traemos datos sobre nacimientos en España como has podido ver en el spoiler del titular pero analizamos en detalle a continuación.
También volvemos a nuestros clásicos enladrillados, quién los desenladrillará, porque esta semana ha habido novedades sobre el complejo de lujo de Valdecañas, en los municipios cacereños del Berrocalejo y El Gordo. La tradición de los hechos consumados sigue fuertemente arraigada en este país. Se atribuye a Jesús Gil la frase que dice que "el hormigón tarda en fraguar sesenta días, mientras que una sentencia judicial en España tarda en llegar diez años". Eso es prácticamente lo que tardó el Tribunal Constitucional en anular la modificación de la Ley del Suelo de Extremadura que pretendió legalizar el complejo de Valdecañas. Esa sentencia fue en 2019, luego han venido sentencias de demolición, incluidas del Tribunal Supremo, y aquí seguimos.
Para que no se borre la historia, para entender los patrones de comportamiento de los poderes públicos, los económicos y los tribunales, y para investigar durante meses temas que nos afectan a todos y de los que no se habla es para lo que nació DATADISTA. Por eso te necesitamos.
Arrancamos.
El primer cuatrimestre de 2023 marca el mínimo histórico de nacimientos desde 1941
El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó la semana pasada la estimación de nacimientos mensuales hasta abril de 2023. Entre enero y abril de 2023 se registraron solo 103.443 nacimientos. Esta es la cifra de nacimientos más baja en España desde que comenzó la serie histórica en 1941.
La cifra más alta de nacimientos registrada en el primer cuatrimestre fue en 1964, con 233.041 nacimientos. Desde la década de 1980, la disminución de nacimientos ha sido una tendencia constante, con algunas fluctuaciones ocasionales. Un ejemplo de esto es el aumento producido en la década de 2000, debido a la llegada de población extranjera atraída por la burbuja del ladrillo. En los primeros cuatro meses de 2008, se produjeron 168.286 nacimientos. Desde entonces, la disminución ha sido constante hasta llegar a las cifras provisionales de 2023.
La pandemia de la covid-19 también parece haber tenido un impacto en la natalidad. El total de nacimientos durante los primeros cuatro meses del año ha disminuido en un 9,25% entre los ocurridos en el primer cuatrimestre de 2020 y los de 2023.
Valdecañas, los hechos consumados del ladrillo resisten un poco más
Como te venimos contando desde los orígenes de DATADISTA, en 2016, cuando nos subimos a una moto con una cámara en el morro (de la moto) para investigar la corrupción, los daños y las historias tras el negocio del ladrillo en la costa, en España es más fácil planificar construcciones sobre terreno no urbanizable, incluso ultraprotegido, dar licencias irregulares, vender las viviendas y lucrarse a la vista de todo el mundo que tirarlas cuando la justicia, tras un larguísimo camino de años de recursos y remiendos en las leyes para evitar la piqueta, decide que aquello no hay forma de legalizarlo.
Las sentencias en firme sin ejecución, los recursos infinitos ante los tribunales pagados con dinero del contribuyente y algunas trampas que los legisladores han ido dejando en el BOE para evitar las demoliciones nos han plagado España de edificios que según los Planes de Ordenación Urbana o las leyes de protección medioambientales o la Ley de Costas o todo ello a la vez que, aunque los veas, aunque se levanten como una mole inmensa en pleno Parque Natural o a 80 centímetros de la barandilla de una pequeña casa de una planta, no están ahí. Es zona verde, o zona especialmente protegida, o simplemente un área del plano donde la edificabilidad permitida ha sido superada hasta 10 veces.
El Tribunal Constitucional, a quien recurrieron los afectados y la Junta de Extremadura cuando vieron agotada la opción del Supremo, decidió, en el pleno del pasado martes por seis votos frente a cinco (un balance muy ajustado que se ha hecho demasiado habitual) paralizar de forma cautelar la demolición del complejo de lujo Marina Isla de Valdecañas, situado entre los municipios de Berrocalejo y El Gordo en Cáceres.
Parecía que iba a haber un antes y un después de la sentencia del Supremo sobre la urbanización, levantada en una zona de protección especial por pertenecer a la Red Natura 2000 y Zona Especial de Protección de Aves (ZEPA). El Alto Tribunal, que dio la razón a Ecologistas en Acción-CODA y decidió que el complejo debía demolerse en su totalidad, utilizó unos argumentos que parecían crear un importante precedente.
El Supremo dejaba sin efecto los autos del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura en 2020 que acordaban la conservación del hotel, viviendas y campo de golf e instalaciones construidas y en funcionamiento al sentenciar "que deberán ser demolidas como el resto de obras e instalaciones".
¿Qué ocurrirá finalmente? Difícil saberlo, de momento las medidas cautelares simplemente pretenden evitar que, en caso de que la sentencia del Constitucional acabe indultando por la vía de los hechos lo construido en Valdecañas, se publique cuando ya solo queden escombros. Sin embargo de lo que no hay duda es de que este es un capítulo más del tiempo que puede pasar desde que se construye algo ilegal hasta que la Justicia actúa.
En este artículo dedicado precisamente a comparar el caso de Valdecañas con la tradición de los hechos consumados del ladrillo en España, comparamos el pretendido cambio de la Ley con efecto retroactivo que intentó la Junta de Extremadura tras la primera sentencia con otras modificaciones efectuadas después de las grúas, como las que hacía de madrugada el Ayuntamiento marbellí de la era del Gil para tratar de legalizar las miles de viviendas que ya se habían construido en la ciudad; o el misterioso amaño de los planos para permitir la construcción del hotel ilegal de El Algarrobico.
También hablamos del repetido argumento de la falta de fondos públicos para cumplir con las sentencias de demolición, utilizado por el Ayuntamiento de Marbella actual para no indemnizar a los afectados del gilismo o por el Ayuntamiento de Carboneras para seguir dilatando años y años la transformación de la clasificación del suelo en el que se levanta el Algarrobico o la propia Junta de Extremadura, calculando los costes de indemnizar a los propietarios de las casas y bienes de Valdecañas y ligando la imposibilidad de afrontar el coste incluso al mal momento económico derivado de la pandemia.
Embalses de uso consuntivo, al 39,7% de capacidad
Los embalses de uso consuntivo en España, destinados al riego y al suministro de agua para hogares e industrias, se encuentran esta semana al 39,7% de su capacidad total. En las tres últimas semanas, las reservas de estos embalses han subido debido a las lluvias ocurridas entre los meses de mayo y junio. En la última semana, los embalses han aumentado su volumen en 22 hectómetros cúbicos (hm³) de agua, lo que representa el 0,1% de su capacidad total, llegando a los 15.362 hm³ de agua embalsada con variaciones entre -48 hm³ en la cuenca del Guadiana y una ganancia de 79 hm³ en la cuenca del Ebro.
A pesar de la mejora en las últimas semanas, la situación de los embalses de uso consuntivo en España sigue siendo delicada. Actualmente, el agua embalsada es un 15,1% inferior al promedio de los últimos cinco años.
Si nos fijamos en una de las Cuencas Internas de Cataluña, que tiene uno de los menores porcentajes de agua almacenada con respecto a su capacidad total, podemos observar que su situación ha mejorado en las últimas tres semanas. Sin embargo, su capacidad total está muy por debajo del promedio de los últimos cinco años y en una situación peor que en el año hidrológico anterior.
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